miércoles, 5 de agosto de 2020

Los hitos del Monte de Valdelatas.

El Monte de Valdelatas, en el término municipal de Alcobendas, constituye una de las reservas naturales más interesantes y desconocidas de Madrid. Dotada de una venerable antigüedad (existen fuentes documentales desde épocas medievales), en su terreno se encuentran algunos elementos, restos de su historia, como son los hitos que hoy traemos a esta humilde página.
Uno de lo antiguos mojones del monte de Valdelatas.
Desperdigados por la Dehesa se encuentran una serie de mojones, probables marcas de límite de la dehesa. Labrados en granito, de forma cuadrangular y rematados en un cuerpo piramidal, estas señales se alzan a distancias regulares unos de otros, lo que nos hace pensar en el carácter lindero de los mismos.
Otro de los hitos existentes en el monte de Valdelatas
Dos de sus caras muestran sendas inscripciones: una letra y un número. En una de ellas, como vemos en la imagen siguiente, se lee una M y la cifra 81, mientras que, en la cara opuesta, vemos la letra A y la cifra 22. Como podemos apreciar en las imágenes, la grafía de ambas delatan su antigüedad, la cual no no atrevemos a precisar.
Vista de las dos inscripciones de uno de los mojones del monte de Valdelatas.
La Dehesa de Valdelatas se encuentra situada entre los términos municipales de Madrid y de Alcobendas, perteneciendo a este último en su mayor parte, por lo que es probable que ambas inscripciones, A y M, aludan a estas dos poblaciones. Sin embargo, hay que advertirlo, Valdelatas se encontraba anexo a Fuencarral hasta que, en 1949, este antiguo pueblo fuera anexionado a Madrid. En cuanto a las cifras, reconocemos no tener ningún indicio de su significado.
Hito del monte de Valdelatas, próximo a la valla que cerca el lugar en la actualidad. Se puede apreciar comose ensancha levemente en la base.
Sea como fuere, estos antiguos mojones, son recuerdos de tiempos pasados y restos de nuestra historia que no sóloddeben ser conservados. Hay que estudiarlos, comprenderlos y, sobre todo, darles el valor que merecen. 

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