El acueducto medieval de Segorbe

Antigua sede ducal, la ciudad de Segorbe, ubicada en la comarca castellonense del Alto Palancia, respira Historia en cada una de sus calles. Restos de una fuerte muralla ciñen aún su perímetro y, adosado a los viejos muros medievales, encontramos los arcos de un acueducto, erigido en la misma época. Hoy visitamos Segorbe y nos detenemos ante esta obra de la ingeniería árabe. 

Dos de los arcos supervivientes del acueducto medieval de Segorbe.

El acueducto de Segorbe se encuentra adosado a la muralla de la localidad, discurriendo paralela a las calles de Argén (deformación del francés argent, plata), y de la Muralla. Sus arcos ojivales delatan su origen medieval, aunque su imagen se ha visto alterada a lo largo de los siglos.

Tramo del acueducto adosado a la Torre del Botxi, o del Verdugo, perteneciente a la muralla medieval de Segorbe.

La construcción del acueducto se sitúa en el siglo XI, época en que Segorbe pertenecía a la Taifa de Valencia, con el objetivo de llevar las aguas del manantial de La Esperanza, situado a un kilómetro escaso de la vecina Navajas, hasta la población. Sin embargo, su fábrica original se encuentra muy alterada debido a la profunda reforma que se llevó a cabo en el siglo XIV, cuando recibió el aspecto que, en líneas generales, podemos admirar en la actualidad.

Tramo del acueducto existente en la calle de la Muralla.

El arranque del acueducto lo encontramos en la calle de la Muralla, junto al tramo de escaleras que conducen a las calles de Tebaida y del Romano. En este punto, rota la continuidad de su fábrica, observamos con claridad el espacio que albergaba la conducción del agua.

Restos del acurducto, en el que observamos el hueco por el que corría el agua.  

Tras un breve tramo dominado por dos amplios arcos ojivales alcanzamos el trazado de la carretera nacional N-234, hoy ocupado por las calles de Colón y de la Esperanza. Dicha carretera hizo que otro de sus arcos fuese demolido en el año 1860, sustituido por una artística conducción metálica coronada por el escudo de la ciudad. El año que aparece, 2007, indica cuando se restauró el monumento.

Conducción metálica construida en el siglo XIX, una vez demolido el arco original que salvaba el trazado de la carretera.

Fijemos nuestra atención en la pequeña puerta gótica, rematada por un elegante arco conocpial abierto en una de las jambas erigidas tras el derribo de la fábrica original. No fue esta su ubicación original, ya que procede de la Cartuja de la Vall de Cristo, en las proximidades de Altura, localidad vecina a Segorbe, que había sido exclaustrada durante la Desamortización de Mendizábal, en 1836.

Arco conopial, colocado en una de las jambas construidas en 1860, después del derribo de uno de lso arcos originales del acueducto.

La curiosidad nos puede y dirigimos nuestra mirada hacia el interior de este arco, descubriendo el arranque de una escalera de caracol de evidente estilo gótico. Su origen, al igual que el arco por elque se accede a la misma, se encuentra en la cercana Cartuja de la Vall de Cristo.

Arranque de la escalera gótica del acueducto de Segorbe.

Junto a acueducto, en un breve jardincillo a la sombra de la Torre del Botxi, o del Verdugo, encontramos un pequeño tramo de la conducción metálica decimonónica, cuya labra original se desplomó en 1963.

Fragmento de la conducción construida en el siglo XIX, sustituyendo al tramo derruido con motivo de la ampliación de la carretera nacional N-234.

FUENTES CONSULTADAS.

• Palomar Macián, Vicente. El acueducto de Segorbe. Bol. del Instituto de Cultura del Alto Palancia - 12. Segorbe, Diciembre, 2000. (www.academia.edu).
• Segorbe, puerta abierta (turismo.segorbe.es)